Valla
infancia.
Linda niña de porcelana, con manos de
seda, sonrisa de voluntad implacable, ojos llenos de humildad como una luna
brillante.
Siempre miedosa a la obscuridad, a esos cuartos vacíos y sin
luz; pero tenías a tus fieles protectores tus
hermanos, los monstruos unas par de cobijas amontonadas, los caballos unos palos de escoba,
así fue tu gran infancia….
Valla infancia llena de alegría, como un
sol tan cálido que invade el alma
,aprendiste a valorar, a ser humilde y compartir momentos especiales.
Ahora eres una señorita; es extraño
decirte así, aún
no
me acostumbro a pensar que dejaste de ser una semillita para empezar a ser una
flor, sé que la juventud es dolorosa, ahora tus cuartos obscuros serán por
corazones rotos. Quien diría que podrías sufrir tanto por el mal de amores
quien pensaría que la soledad iba a ser tu mejor amiga.
Sé que es duro esta etapa, que quisieras
tener una barita mágica y regresar el tiempo a tu niñez, es irónico que cuándo
estabas en esa etapa querías crecer y ahora que has crecido piensas querer
regresar pero es como una estrella fugaz lo que pasa una vez jamás volverá a
pasar, piensa que lo mejor es abrir las alas y aspirar a nuevas metas.
Es momento de atesorar lo niños que fuimos, guarda en tu alma ese brillo de niñez
porque así, podrás seguir siendo un niño desde el fondo de tu ser. Aprecia lo que viene porque eso será las mejores lecciones de tu vida.
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